En un rincón desconocido de la galaxia, alejado de las titánicas batallas entre los Rebeldes y el Imperio, se forjó una leyenda. Aquí, donde las estrellas son tan numerosas como los grános de arena, surgió un jugador como ninguno otro: Inhakinho.

No era un Jedi en el sentido tradicional, Inhakinho no blandía un sable de luz ni volaba en un X-Wing. En lugar de eso, su destreza se mostraba en campos de batalla virtuales, dominando survivals y shooters con una precisión sobrenatural. .

Decían que tenía el don del Aim, y aquellos que jugaban contra él juraban que tenía una conexión especial con la Fuerza, una que le permitía anticipar cada movimiento del enemigo y responder con tiros letales. . .


Pero Inhakinho no buscaba la fama ni la gloria. En su corazón, simplemente disfrutaba del juego y la camaradería. Sin embargo, su habilidad no pasó desapercibida para el Imperio. . .

Así, en un rincón lejano de la galaxia, la leyenda del Jedi Inhakinho creció. No como un guerrero con sable de luz, sino como el jugador con el Aim más afilado que la galaxia jamás haya visto. . .

Que la Fuerza del Juego esté contigo, siempre.